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Yoga

Hakini y Vishnu, Mudras!

Siento los mudras como ese punto de unión de la energía, el cuerpo y la mente…junto con la respiración y las asanas, nos ayuda a conectar la materia con el espacio.

Con un poco de observación, nos damos cuenta como muchas veces hacemos un mudra sin saberlo, porque todos compartimos una sabiduria ancestral que nos une, así como heredamos otros temas más densos, lo sutil tambien forma parte de nuestra herencia, recordar y conectar con ella, puede ser más fácil de lo que parece y mucho más cotidiano de lo que creemos.

Potenciar esa parte de nuestra constitución es nuestra responsabilidad, y lo que se conoce como ser consciente.

Hakini nos permite conectar con nuestro poder espiritual,controlando mejor los pensamientos y ganando poder sobre la mente. Puedes fijarte que muchos oradores, politicos, sacerdotes e incluso profesores lo usan, y puede que muchos lo hagan de forma inconsciente, surge, porque todos estamos guiados por nuestra intuición, esa sabiduria interna que nos acompaña siempre.

Vishnu, activa, equilibra y limpia los chakras, en especial los 3 primeros, raíz, sacro y plexo solar (Muladhara, Swanisthana y Manipura). No es casualidad que lo usemos en el pranayama Anuloma Viloma.

autoconocimiento

Entender vs Sentir

En mi perfil de Instagram estoy intensa con el tema sentir, y sí, viene por los 7 pasos del camino del autoconocimiento que dejé hace unos días y también pueden leerlo en leonoracosta.com.

Les cuento brevemente una parte de mi historia, yo era una persona que lo de sentir lo tenía un poco bloqueado, y no hablo de emociones únicamente, me refiero a mi intuición y aunque de pequeña fui bastante intuitiva, de mayor los miedos que me habían generados muchas historias arrastradas y no procesadas, fueron saliendo, hasta el punto de explotar en una enfermedad, entonces me di cuenta que mi mente tenía el control, estaba llena de miedos, cubierta por mil mascarás, personajes que surgían para estar más cómoda en el mundo que me exigía ser de una forma diferente…entonces comencé un proceso de autoconocimiento y entendí muchas situaciones vividas, creencias, patrones…los para qué y los por qué, pero seguí sin poder sentir, eso que en muchos momentos de mi pasado, había sido mi única brújula.

Gracias a muchos movimientos energéticos, comencé a integrar eso que había entendido y mi cuerpo comenzó a sanar.

Conecté con mi sentir cuando pasé por una situación y pude elegir, a pesar de las miles de razones que mi mente me daba para no hacerlo, volví a elegir desde mi sentir, y entonces fue maravillo, poder decir no sé qué va a pasar, pero siento que es lo que quiero, y pase lo que pase, vivir esa experiencia que me ha permitido volver a sentir y conectar con mi poder interior.

La mente necesita entender…el alma te invita a sentir.

Sí quieres escuchar cómo conecté con mi sentir, cómo puedo identificarlo y así elegir lo mejor para mí, te invito a escuchar mis podcast.

Yoga

Asanas al despertarnos

Me gusta practicar asanas que sean amables con mi cuerpo, siento que cuando aprendemos a escucharnos nos damos cuenta que menos es más y que una postura sencilla puede darnos más beneficios que una complicada, siempre que la intención sea la de escuchar, observar y permitir la guía interna.

Igualmente podemos darnos cuenta en la medida que avanzamos en la practica, que nuestro cuerpo nos va a pedir un asana diferente, pero no ocurre desde la exigencia, sino desde la evolución de permitir el proceso.

Al despertar, para mí lo mejor es comenzar el día siendo consciente de mi respiración y las asanas me ayudan de una forma activa a llevar la atención a ella, a la vez que me ayuda en la construcción, alineación y sentir del asana.

Por eso lo primero es sentarme en postura de meditación, acompañar con un Mudra y activar la respiración, luego estirar el cuello, para luego continuar con la escucha de mi cuerpo despertando poco a poco, haciendo torsión de mi espalda, luego un poco de equilibrio, para estirar tanto la parte posterior como la anterior y finalizamos abrazándonos, reposando y sosteniéndonos para sentir nuestra energía y observar nuestra mente con una postura de la que estoy enamorada como el embrión o Balasana.